Después de una disputa sin precedentes, Ticketmaster ha acordado una compensación de 10 millones de dólares por haber ingresado de forma ilegítima a las redes de sus competidores. Live Nation, su compañía matriz, reconoció que contrataron a un ex empleado de CrowdSurge para acceder a las redes de esta firma y obtener una ventaja injusta en el mercado.